lunes, 12 de octubre de 2015

Primera parte. Síntesis


Malala es la principal protagonista del libro, por esta razón, en esta primera parte conocí un poco de su vida y que es lo que busca y defiende. Ella, una joven humilde, tranquila, perseverante, estudiosa. Tenía diferentes gustos, como jugar al cricket, su color favorito, el rosa. Aunque ella se identifica por ser poco femenina.
 Vive en el valle de Swat, en una aldea, Mingora en Pakistán, y tiene como principal objetivo, lograr que todas las personas tengan los mismos derechos en su país, lástima que ella lo ve tan lejos.
 Su familia, esta integrada por sus padres y sus dos hermanos, con los que se lleva bien, aunque siempre hay discusiones, como entre todos los hermanos, ama a sus padres, pero más que nada a su papá, ya que este siempre tiene las palabras justas para hacerla reír y sentirse segura de sus propias decisiones.
 Esta familia, no tiene mucho, pero todo lo que tienen es para sus hijos y más que nada para ayudar a quien necesite una mano, porque siempre por sobre todo, la ayuda al prójimo.
 Ella, es una joven que socializa mucho, por estas razones tiene amigos, una de ellas es Safina, su vecina, que a pesar de tantas idas y vueltas, es su mejor amiga, junto a Moniba, su amiga del colegio. Con estas dos chicas compartió muchísimas cosas.
 También observe, que ella estaba muy motivada para que las mujeres y los niños puedan educarse de la forma que sea, pero con el simple hecho de concurrir a la escuela, hasta que un día, en donde viven sus parientes, ella se entera de que eran los "talibanes", aquellos que desataban grandes catástrofes en Afganistán, que está al norte de Pakistán.Donde destruían las escuelas. Al saber sobre esto, ella le rezaba a Dios en todo momento, pidiéndole que por favor no suceda nada parecido en su país, porque la educación era lo más importante para ella, a la par de su familia. Pero su padre, como siempre, le dijo esa vez, "tranquila Malala, yo protegeré tu libertad, vos seguí tus sueños". Siempre con las palabras justas, así ella retomó confianza y empezó a planear como lograrlos. Siempre teniendo en cuenta, una hoja y un lápiz, el lápiz mágico, pienso que lo llama así porque era la base para que todo pudiera empezar.
 Para finalizar, quiero resaltar, una buena actitud que tuvo su padre, que puso una foto suya en el árbol genealógico, donde solo iban los hombres, allí un incentivo más a seguir soñando.   

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